La Medicina de Familia y Comunitaria, es una especialidad médica reconocida en el estado español desde 1978. Su ámbito de actuación es la atención primaria de salud.
El perfil del Médico de Familia es el de un profesional para el cual la persona es un todo integrado por aspectos físicos, psíquicos y sociales vinculados a un contexto familiar y social concreto, lo que le permite llevar a cabo una atención continuada al colectivo de personas que atiende para elevar el nivel de salud de las personas que están sanas, curar las que están enfermas y cuidar, aconsejar y paliar los efectos de la enfermedad, cuando no es posible la recuperación de la salud.
Estas características específicas del perfil profesional del Médico de Familia conforman un cuerpo propio de conocimientos derivado, fundamentalmente, de su ámbito de actuación específico: el de la Atención Primaria de Salud y de una forma propia de llevar a cabo esta Atención a través de un enfoque biopsicosocial, en el que adquieren verdadero protagonismo la integración de las actividades de curación de la enfermedad con las actividades de promoción y prevención, rehabilitación y cuidados paliativos.
El programa de formación de la Especialidada de Medicina de Familia y Comunitaria consta de 4 años. Aproximadamente la mitad del período de formación se realiza en la Atención Primaria y la otra mitad en diferentes especialidades hospitalarias. La relación del residente con su centro de Atención Primaria y su Tutor se mantiene de forma periódica durante los 4 años para conseguir una valoración formativa que permita ir modulando la adquisión de nuevas habilidades y nuevos conocimientos.
El Programa desarrolla cinco áreas competenciales:
- Las esenciales (comunicación, razonamiento clínico, gestión de la atención y la bioética),
- Las relacionadas con la atención al individuo,
- Las que tienen relación con la atención a la familia,
- Las relacionadas con la atención a la comunidad, y
- Las que se relacionan con la formación continuada y la investigación.
La Atención Primaria de Salud debe ser la base del sistema sanitario por lo que es fundamental la buena preparación de los futuros médicos de familia, para que sean capaces de ofrecer una mejor atención al usuario, más accesible, más humana, más integral y más eficiente.